catedral nueva salamanca
La necesidad de construir este edificio surgió al quedarse pequeña la que ahora es conocida como Catedral Vieja por el auge de la ciudad, debido a la actividad universitaria, a comienzos del siglo XVI. Para su construcción se solicitó ayuda a los Reyes Católicos. Las obras comenzaron en 1512, sobre un proyecto de Gil de Ontañón, y terminaron en 1733, por lo que esta catedral es una de las últimas manifestaciones del gótico español.
Estaba previsto que la Catedral Vieja siguiera en pie para permitir el culto hasta finalizar los trabajos de edificación de la Nueva y que en ese momento fuera derribada. Cuando concluyó la obra, más de dos siglos después, la idea fue reconsiderada y, por suerte, ambos edificios fueron conservados.
La fachada principal de la Catedral Nueva llama la atención por su abundante decoración, entre la que destacan los relieves que representan las escenas del Nacimiento y la Epifanía, situados debajo de un magnífico Calvario. La Puerta de Ramos, ubicada en la amplia y monumental Plaza de Anaya es la representación de la entrada de Jesús en Jerusalén, aunque tienen mucha más fama las extrañas figuras que se esconden entre la decoración: el dragón (o mono) comiendo helado, el conejo de la suerte (que en realidad es una liebre), la cigüeña...y, por supuesto, el conocidísimo astronauta.
En los dos extremos del crucero de la Catedral pueden verse dos fantásticas portadas. La de la parte norte junto a la Puerta de Ramos y la de la parte sur formando parte del bellísimo Patio Chico.
La presencia de la escultura de un astronauta en la pared de una catedral gótica ha dado lugar a muchas falsas leyendas. La realidad es mucho más simple. El astronauta de la Catedral Nueva fue esculpido en 1992 con motivo de la restauración de la Puerta de Ramos, ya que es tradición que se añada un elemento contemporáneo en cada una de las restauraciones que se realicen.
El interior tiene planta rectangular y está formada por tres naves y varias capillas-hornacina situadas en los laterales. Sorprende por su magnitud, la esbeltez de sus columnas, que sostienen su bóveda gótica, la armónica perspectiva de los espacios, la luminosidad y el equilibrio entre las diferentes influencias arquitectónicas que hay en ella. Asimismo, por la decoración de las cornisas que dan la vuelta a la Catedral por dentro. También destacan el trascoro y la cúpula barrocos, los órganos de los siglos XVI y XVII y el Cristo de las Batallas, de estilo románico y llamado del Cid Campeador.
La Capilla Mayor carece de retablo, pero está presidida por una imagen de la Asunción y por las urnas que guardan los restos de San Juan de Sahagún (patrón de Salamanca) y Santo Tomás de Villanueva.
Está cubierta por una increible bóveda policromada y dorada.
En medio de la nave central y frente a la Capilla Mayor puede verse el coro de los canónigos, un impresionante conjunto barroco diseñado por Joaquín Benito y Alberto de Churriguera. Está estructurado en dos alturas: el coro alto y el coro bajo. Los asientos del coro alto están decorados con representaciones en relieve de Cristo Salvador, los Apóstoles, los Evangelistas y otros santos y Padres de la Iglesia. En el coro bajo pueden verse imágenes de vírgenes y santas. El espacio del coro y la Capilla Mayor está rodeado por una reja elaborada por Duperier, rejero francés del Duque de Alba.
En el crucero norte se encuentra una imagen del Cristo de la Agonía Redentora que data del siglo XVI.
Este Cristo, de extraordinario realismo, cuenta con mucha devoción entre los fieles salmantinos. Frente al altar se encuentra el sepulcro de Francisco de Bobadilla,
obispo que puso la primera piedra de la Catedral.
La Catedral Nueva tiene las siguientes capillas laterales:
Capilla de San Clemente, Capilla de Diego de Neyla, Capilla de Santiago y Santa Teresa, Capilla de Nuestra Señora de la Verdad, Capilla de San Antonio, Capilla de la Virgen de la Cabeza, Capilla de la Virgen de Lourdes, Capilla de la Virgen del Pilar, Capilla de Nuestra Señora de la Soledad, Capilla del Cristo de las Batallas, Capilla de San José, Capilla de la Virgen de los Dolores, Capilla de San Nicolás de Bari, Capilla de Jesús Nazareno, Capilla de la Virgen del Desagravio, Capilla de la Virgen de Morales, Capilla del Presidente, Capilla Dorada y Capilla de San Lorenzo.