basílica del santuario de nuestra señora de estibaliz
Basílica de Nuestra Señora de Estibaliz patrona de Álava, en una talla del siglo XII. Se trata de una iglesia románica, con elementos protogóticos, que tiene planta de cruz latina con amplio crucero, tres capillas asimétricas e independientes y una nave dividida en tres tramos. Asimismo, cabe destacar su cabecera con tres ábsides y la amplia decoración escultórica de sus muros.
Las dimensiones del templo actual son de 36 metros de eje mayor por 9 en su nave y 23 de transepto. Es templo de planta de cruz latina, orientado, con nave crucero a la que abren sus tres ábsides orientados. Aun cuando sus orígenes se remontan al siglo XI y aun antes, las estructuras actuales, en buena parte restauradas, corresponden mayoritariamente por su estilo a finales del siglo XII o principios del siglo XIII.
Portada de dos arquivoltas y guardapolvo apuntados, ricamente decorados con motivos vegetales y entrelazos que parecen surgir de las fauces de un leoncito con que arranca desde el este la arquivolta exterior. Por encima de la portada y de su tejaroz, hay un ventanal a modo de pequeña portada decorado con tres arquivoltas de medio punto continuando el sobresaliente cuerpo en que se inscribe la portada. Más arriba, en lo alto, hallamos una espadaña bífora de sabor castellano.
La cabecera muestra en su cilindro central, dos semicolumnas adosadas rematadas en sendos capiteles, que quedan bastante por debajo de la actual cornisa, indicando su primitiva altura. Solo en ábside sur posee un pequeño ventanal decorado con una arquivolta. Y bajo el alero del central, canecillos decorados como el del burro músico e incluso un capitel decorado con sirena de doble cola, que carente de fuste hace funciones de canecillo. La decoración de la portada es exuberante y puntillista. Tanto las jambas como los dos pares de columnas que la flanquean lucen motivos decorativos de geométricos y entrelazos. Los capiteles que coronan las mencionadas columnas.
Durante el siglo XX se realizan continuamente obras de restauración y mantenimiento en el templo, se edifica un nuevo Monasterio y una Comunidad Benedictina se hace cargo del mismo en 1923. La imagen de la Virgen es del siglo XII. Ha sufrido, a lo largo de los años, diversos avatares, siendo restaurada tres veces. Remodelada por el escultor Fernández de Viana en 1897. Restaurada en el año 1984. Actualmente se puede apreciar en ella parte de su policromía original.