GALICIA
Como Patrimonio de la Humanidad, la Catedral de Santiago es la más conocida y la más importante en Galicia. Todo un símbolo religioso, artístico y cultural que la provincia de A Coruña luce y mima con orgullo. Aquí se encuentra el sepulcro del Apóstol Santiago y desde sus inicios en el siglo XI se ideó para impresionar como uno de los mayores templos de la cristiandad. Y desde luego que impresionan los diferentes estilos arquitectónicos, el Pórtico de la Gloria, sus torres, el Altar Mayor, los coros y las sucesivas capillas. El destino final de los peregrinos que hacen el Camino de Santiago no se merece menos. Y puede que con una sola visita no baste y haya que volver para ver otra vez el sobrecogedor botafumeiro, la cripta o el Museo de la Catedral.
La Catedral Santa María de Lugo es un templo de origen románico que empezó a construirse en el siglo XII. Las obras se encargaron al Maestro Monforte y las sucesivas ampliaciones han sabido combinar con maestría la mezcla de estilos desde el románico hasta el neoclásico. No se puede dejar de ver la Girola y la Capilla Mayor, que son góticas, ni la Sacristía o el Claustro en estilo barroco. También barroca es la Capilla de la Virgen de los Ojos Grandes, la patrona de la ciudad, a la que acompaña como patrón de Lugo San Froilán, con su propia Capilla en la Catedral en estilo Renacentista.
Pero la provincia de Lugo tiene otra Catedral, la de Mondoñedo, un auténtico tesoro histórico artístico de estilo románico que empezó a construirse en 1219. Con posteriores añadidos góticos, barrocos y clásicos, su interior es un verdadero espectáculo. La puerta principal y el ábside mayor son románicos, mientras que el crucero, la Sacristía y la fabulosa sillería del Coro tallada en madera de nogal tienen un estilo gótico. Uno de los atractivos principales de la Catedral de Mondoñedo es su Museo de Arte Sacro, con algunas de las obras más importantes del arte religioso en Galicia.
La ciudad de Ourense dedica a San Martín su catedral, un hermoso templo románico de transición con claras influencias cistercienses y compostelanas que empezó a construirse en el siglo XII sobre una originaria edificación sueva. Hay que recorrer toda su fachada para empaparse del mejor estilo románico y en su interior le sorprenderá el Cimborrio gótico y el impresionante retablo del Altar Mayor. Tampoco puede dejar de ver el Tesoro de la Catedral, que es su colección de Arte Sacro.
La provincia de Pontevedra nos hace un regalo para los sentidos en la ciudad de Tui con su Catedral de Santa María, todo un símbolo que reutilizó una basílica paleocristiana para levantar en el siglo XII una catedral fortificada. Es precisamente su apariencia de fortaleza reforzada por las torres almenadas lo que más llama la atención del exterior de la Catedral de Tui. Aunque el interior no defrauda con los capiteles del Transepto, la Sala Capitular de estilo románico o el Claustro de estilo gótico.
